El acusado agredió en distintas ocasiones a su expareja y madre de su hijo. Ademas violó medidas judiciales de protección a la víctima.
El fiscal penal de Rosario de Lerma, Daniel Alejandro Escalante, imputó a un hombre de 27 años, acusado de haber cometido una serie de delitos de violencia física y amenazas en perjuicio de su expareja, con quien mantuvo una relación de 10 años y con la que tiene un hijo en común. Los hechos denunciados ocurrieron en repetidas ocasiones, violando además medidas judiciales previamente dictadas a su favor.
Los incidentes por los cuales el hombre fue imputado se desprenden de diversas denuncias presentadas por la damnificada ante la Comisaría N.º 2 de Rosario de Lerma.
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En una de las denuncias, que data del 8 de septiembre de 2024, la mujer relató que el acusado irrumpió de forma violenta en su domicilio, vociferando amenazas de muerte mientras golpeaba la puerta. Una vez dentro de la vivienda, comenzó a agredirla físicamente, propinándole golpes en el rostro, en un estado evidente de ebriedad. La mujer, aterrorizada, intentó proteger a su hijo menor y salir de la casa, pero fue alcanzada por el hombre, quien continuó con la agresión hasta que fue interrumpido por la llegada de dos personas.
Las agresiones de Medina no solo incluyen violencia física, sino que también suponen la violación de medidas cautelares dictadas por el Juzgado de Violencia Familiar y de Género. El acusado tenía una orden de exclusión del hogar y una prohibición de acercarse a menos de 300 metros de la víctima, así como de establecer cualquier tipo de comunicación con ella. A pesar de ello, el 24 de junio, durante un evento familiar en el que celebraban el cumpleaños de denunciante, el hombre volvió a agredirla física y verbalmente, lo que derivó en una nueva intervención policial.
Por otra parte, el 23 de agosto, el acusado volvió a presentarse en el domicilio de la víctima en estado de ebriedad, lanzando amenazas y piedras, una de las cuales impactó en la pierna de mujer. Nuevamente, la policía acudió al lugar, pero el hombre ya había escapado cuando los efectivos llegaron. Ante la reiteración de hechos violentos y el incumplimiento de las medidas judiciales, la víctima expresó ante la Fiscalía su temor por su vida y la de su hijo.
El fiscal Escalante imputó al acusado por los delitos de lesiones doblemente agravadas por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género (tres hechos), amenazas (dos hechos), y desobediencia judicial (dos hechos), en concurso real, conforme al Código Penal. También solicitó el mantenimiento de detención.
