Un hombre de 35 años fue condenado a seis meses de prisión efectiva tras ser encontrado culpable de agredir a su expareja y a la madre de esta, además de dañar el parabrisas del vehículo de la víctima. El acusado ya contaba con medidas de prohibición de acercamiento vigentes, las cuales había violado en varias ocasiones.
El fiscal penal de Rosario de Lerma, Daniel Alejandro Escalante, representó al Ministerio Público Fiscal durante la audiencia celebrada ante el Juzgado de Garantías de 4ª Nominación, a cargo del juez Diego Rodríguez Pipino. Durante la audiencia, se resolvió el acuerdo de juicio abreviado por los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo y el género, desobediencia judicial en dos ocasiones, y daños.
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El incidente ocurrió el 1 de septiembre, cuando el acusado y su expareja coincidieron en una fiesta en el Sindicato del Cuero, en Rosario de Lerma. Durante el evento, el hombre, en un arranque de violencia, golpeó a la mujer en el ojo derecho, según constató un informe médico. Horas más tarde, cuando la víctima y su madre acudieron al domicilio del agresor para retirar pertenencias, el acusado agredió a la madre lanzándole una campera al rostro y arrojando piedras contra el parabrisas del vehículo familiar, causándole daños.
A pesar de tener una orden judicial de restricción emitida en abril de 2024, el imputado continuó violando las medidas de alejamiento, lo que finalmente derivó en su condena. Además de la pena de prisión, se le impuso la obligación de reparar los daños causados al vehículo, con un costo estimado de $750.000, a ser abonado en tres cuotas.
El imputado fue trasladado de inmediato a la Unidad Carcelaria N° 1, donde cumplirá su condena hasta marzo de 2025. «La reincidencia en actos de violencia y la desobediencia judicial reiterada motivaron la imposición de una firme condena», subrayó el fiscal Escalante.
Las partes aceptaron el acuerdo y la condena quedó firme, destacando la importancia de la firmeza de las autoridades frente a casos de violencia de género.
