La fiscalía pidió su detención y Cornejo busca la domiciliaria. La Justicia acorrala al ex intendente de Campo Quijano. Está imputado por peculado e incumplimiento de deberes de funcionario público. Manuel Cornejo desapareció de los lugares que solía frecuentar
Por: Jaime Barrera Para El Tribuno
La fiscalía pidió su detención y Cornejo busca la domiciliaria. Anoche una comisión policial intentaba dar en las inmediaciones de Campo Quijano con el paradero de Manuel Cornejo, imputado por peculado e incumplimiento de los deberes de funcionario público. El pedido de detención fue elevado por la Unidad de Delitos Económicos Complejos a la jueza de Garantías N´6, este jueves al mediodía.
El exintendente no fue hallado en su domicilio declarado en esta localidad. Se entiende que Cornejo podría pedir que se revoque su detención argumentando que no eludirá la acción de la Justicia ante los hechos que se le imputan mientras estuvo al frente del municipio de Campo Quijano. También podría solicitar la prisión domiciliaria, o medidas sustitutivas, tal es el caso de fijar domicilio real, no salir del país, incluso hasta presentar una caución como garantía.
En la misma causa está imputada la extesorera, Carmen Rosa Méndez, por incumplimiento de los deberes de funcionario y peculado. La fiscalía interviniente no pidió por ahora la detención de la mujer señalada como mano derecha de Cornejo.
El proceso judicial en curso contra el exintendente de Campo Quijano sigue develando las serias anomalías de su administración municipal y que fueron puestas al descubierto en la investigación llevada adelante por la fiscal Verónica Simesen de Bielke.
Ayer a la mañana se pidió el allanamiento y detención del imputado ex jefe comunal ante el riesgo de fuga, lo que dificultará el proceso judicial en curso, según advierte la fiscalía penal.
También cabe la posibilidad de que Cornejo podría llegar a presentar a primera hora de hoy un pedido de prisión domiciliaria que sea fijada en el mismo pueblo de Campo Quijano, donde reside habitualmente junto a su pareja.
El pedido de detención ya había sido solicitado oportunamente apenas se asentaron las primeras denuncias por las irregularidades detectadas en solo dos años de la gestión de Cornejo. Las nuevas pruebas puestas a consideración por la Fiscalía ponen en evidencia los actos de corrupción del exintendente.
Por ejemplo, se conoció que con fondos de la comuna se adquirió una camioneta Chevrolet que no fue registrada a nombre del municipio de Campo Quijano. Como también la investigación de la Fiscalía especifica que el dinero proveniente de la Coparticipación fue utilizado con total y absoluto descontrol, como que llegó a entregar montos de 500 pesos a los vecinos de barrios necesitados previo a las elecciones provinciales de 2019. Estos dineros nunca tuvieron como destino el beneficio público, más bien, se utilizó a beneficio personal, como lo demuestran las pruebas en manos de la investigación.
También se pudo determinar la existencia de maquinarias que pertenecen al municipio de Campo Quijano y que fueron sustraídas poco tiempo antes de finalizar su gestión para ser guardadas en un depósito ubicado en Cerrillos.
Los mensajes entre la tesorera Méndez y Cornejo dejan en evidencia cómo usaban los fondos públicos para cometer irregularidades.
“Teneme efectivo…”
Las pruebas dadas a conocer demuestran con la impunidad que se manejaba el exintendente con las operaciones bancarias. De los mensajes dados a conocer por Fiscalía extrañamente se menciona el título la “rotonda”, “De la rotonda ?”; “Me dicen que está sin fondos” “Mañana le tenemos que dar 9 mil al comisario”, “Teneme efectivo para mí para el finde”; “Manda todo a la rotonda” “Trae bolsos”; “En la mochila están los sellos”.
Los mensajes escritos eran entre la mujer que se desempeñó como tesorera, secretaria de Gobierno y secretaria privada. Para la fiscal “se evidencian incumplimientos injustificados e intencionales de la normativa vigente, como así también desórdenes o ausencia de documentación en el ejido municipal de Quijano relativa a la actividad contable, circunstancia que permite sostener una actividad deliberada de descontrol de los fondos municipales.