En un giro que desafía toda lógica y sentido común, la gestión actual del Concejo Deliberante de Rosario de Lerma ha adoptado una estrategia de comunicación que podría competir en el oscuro arte de la invisibilidad. Si alguna vez nos quejamos de que la información escaseaba en el pasado, ahora nos encontramos ante una situación en la que la opacidad ha alcanzado nuevos niveles olímpicos.
En días pasados, los vecinos solían recibir órdenes del día con anticipación, y los medios tenían acceso a los expedientes y las discusiones en el recinto. Sin embargo, este panorama ha cambiado drásticamente. Pareciera que el arte del sigilo político ha sido perfeccionado al punto de convertirse en una obra maestra contemporánea.
«La transparencia en la política es el mejor antídoto contra la corrupción y el abuso de poder.» – Joe Biden
El telón de esta tragicomedia política se alza sobre el silencio ensordecedor que rodea al Concejo Deliberante. Después de las elecciones, la ciudadanía se ha encontrado con un muro impenetrable de indiferencia. Incluso la comunicación con los vecinos y la prensa se ha vuelto tan rara como un unicornio en pleno centro de la ciudad.
La figura de la presidenta, Sra. Sara Gerez, se ha vuelto tan esquiva como un fantasma en una película de terror. Los concejales, por su parte, parecen haber tomado un retiro sabático en el arte del mutismo. Ni una palabra, ni un gesto, ni siquiera un intento por establecer un diálogo mínimo con la ciudadanía que los eligió.
Los problemas, sin embargo, no se limitan a las palabras no dichas. Aparentemente, el Concejo Deliberante decidió hace algún tiempo darle un toque moderno a sus instalaciones, adquiriendo equipos de sonido y mobiliario reluciente. A pesar de esta inversión, el misterio persiste, ya que cada sesión se convierte en un recital de interrupciones, cortes y fallas de sonido. La ironía no podría ser más deslumbrante: ¡microfonos individuales, pero sin una comunicación clara y efectiva!
Pero esto no es todo. En esta obra maestra del secretismo, no se ha entregado ni un solo «resumen» de los temas tratados o aprobados en el Concejo Deliberante. La incertidumbre reina suprema. En una era donde la tecnología y la digitalización deberían acercarnos a la información, aquí estamos, como espectadores abandonados en la oscuridad, tratando de discernir lo que se oculta detrás de las cortinas cerradas del recinto legislativo.
«La transparencia implica decir la verdad, incluso cuando es incómoda.» – Justin Trudeau
El Concejo se ha convertido en un rompecabezas sin resolver. Las sospechas se acumulan, los cuestionamientos se multiplican y el desconcierto se cierne sobre Rosario de Lerma. La transparencia y la honestidad, valores esenciales en la política, parecen haberse extraviado en algún oscuro pasillo del Concejo Deliberante. ¿Que se Esconde.?. No sesionan o no se escucha … ¿Porque tanto silencio de los concejales actuales y sobre todo de los electos el pasado 14 de Mayo.? ¿Le tienen miedo a hacer su trabajo.?
Quizás, en un futuro no muy lejano, los líderes políticos recuerden que la ciudadanía merece ser informada, que la luz es más poderosa que las sombras y que la transparencia es la base de una democracia saludable. Hasta entonces, seguiremos esperando, quizás en vano, que el enigma del Concejo Deliberante de Rosario de Lerma se resuelva y que el silencio sea finalmente roto por la voz clara y honesta que todos merecemos.
A Zeno.FM Station