En el siglo II, el cómico Juvenal escribió “mens sana in corpore sano”, mente sana en cuerpo sano, quizás en su origen, esta frase tenía un sentido espiritual, pero lo cierto es que la idea de que el deporte o la actividad física generan beneficios para el ser humano, siempre ha estado presente y que en la práctica sirve y mucho tener un cuerpo sano para tener la mente sana.
Por eso en vacaciones, uno tiene la oportunidad perfecta para ejercitarse y/o divertirse, y qué mejor que ir a la pileta de los complejos. Desde un “Vamos a la pile?” a un “Pinta mate / tereré y pile?” son frases comunes en nuestros grupos de WhatsApp durante el verano.
¿Y si no sabemos nadar?¿Qué pasa? Bueno, simplemente decidimos aprender, y es costumbre en complejos encontrar algún profe buena onda que esté dando clases.
Sin embargo, una mala para nosotros, este año nos quedaremos con las ganas de aprender a nadar, ya que desde el municipio no autorizan que se den clases de natación, como sí se venía haciendo anteriormente, y quizás la razón responde a que económicamente estamos complicados y el municipio no puede pagar. Pero la solución es más simple aún, ya que los vecinos y el profe necesitan simplemente que le permitan usar las piletas, ya que los mismos alumnos se encargarían de los honorarios del profe.
Pero volviendo a nuestra realidad rosarina, pareciera que nuestro intendente tiene “voluntad política” con unos sí y con otros no, porque el profe buena onda se quedó sin su llamado de autorización.
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Los más suertudos, los que pueden ir al centro, en el complejo de esa zona se autorizó al profe Ale Rueda a que diera clases de Aquagym y cobre $50 por clase. Por lo tanto, el intendente podría tener más voluntad, ni siquiera pedimos que sea buena onda, y permitir que en el complejo de la zona norte vuelva a dar clases el profe Marcelo Osuna.
No tiene costo, solo es cuestión de ceder el espacio. Y ya que las colonias de vacaciones andan a media pila todavía y que no se sabe tampoco si los niños van a poder volver a los comedores infantiles, por lo menos dejemos que nuestros vecinos tengan oportunidad de aprender a nadar. No es justo que en el verano estemos haciendo nada de nada… bah! El municipio también está en nada de nada, y parece que será en verano, primavera, otoño e invierno.
