La preocupante inactividad de los concejales en Rosario de Lerma tras las elecciones
Aproximadamente dos meses después de las elecciones municipales en Rosario de Lerma, se ha observado una extraña situación en el Concejo Deliberante. Los concejales actuales, en lugar de cumplir con sus responsabilidades y atender las necesidades de la ciudad, han optado por disfrutar de unas poco merecidas vacaciones. Por otro lado, los concejales electos, quienes asumirán sus cargos el próximo 10 de diciembre, parecen mantener un silencio absoluto, sin expresar sus opiniones o mostrar interés por la triste realidad que atraviesa la ciudad. Esta situación de acefalía resulta preocupante para los ciudadanos de Rosario de Lerma.
Es importante destacar que el Concejo Deliberante ha aprobado oficialmente un asueto o período de vacaciones hasta finales de este mes, lo que ha provocado la paralización y control de ejecución de todas las obras en la ciudad. Esto resulta aún más alarmante, ya que una de las principales funciones del concejo es la de controlar las acciones del intendente Enrique Martinez y garantizar el correcto funcionamiento del municipio. Sin embargo, en la actualidad, eligen estar ausentes de sus responsabilidades, dejando en evidencia una falta de compromiso con su rol de representantes del pueblo.
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Además, tras los cambios ocurridos en el Concejo Deliberante luego de las elecciones, se ha vuelto a ocultar información y suspender las transmisiones de las sesiones y comisiones. Esto genera aún más incertidumbre sobre el futuro de la ciudad, ya que los nuevos concejales, quienes deberían estar al tanto de las problemáticas reinantes, no muestran un genuino interés en abordar y solucionar los desafíos que enfrenta Rosario de Lerma.
Resulta lamentable constatar que los nuevos concejales parecen desconocer gran parte de las situaciones que aquejan a la ciudad. No se percibe, al menos a simple vista y en la superficie, un verdadero compromiso por la situación actual y el futuro de Rosario de Lerma. Esta triste realidad genera desconcierto y plantea interrogantes acerca de la capacidad de los nuevos concejales para desempeñar sus funciones de manera efectiva durante los próximos cuatro años. ¿Estarán a la altura de las circunstancias? ¿Continuaremos perdiendo años y viviendo en una ciudad en desastre? Solo el tiempo podrá responder a estas y muchas otras preguntas que inquietan a la comunidad.
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